Introducción
La Calidad de Vida Relacionada con la Salud (CVRS) es un modelo de salud multidimensional y global que tiene varios dominios. Este modelo proviene de la definición de salud propuesta por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como un estado completo de bienestar físico, emocional y social que se asocia con la percepción que un individuo tiene sobre su posición vital, y no con la ausencia de enfermedad1. Por otro lado, la Calidad de Vida Relacionada con la Salud (CVRS) Infantil se define como «la percepción de bienestar físico, psicológico y social del niño y del adolescente dentro de un contexto cultural específico, de acuerdo con su desarrollo evolutivo y sus diferencias individuales» 2.
En los últimos años, esta área se ha convertido en el interés de numerosas investigaciones ya sea para procesos de validación de pruebas o estudios que buscan analizar las relaciones que algunas patologías tienen con este constructo. La mayoría de estos estudios proceden de países anglosajones y con un punto de vista biomédico, por lo que la percepción general de la Calidad de Vida Relacionada con la Salud (CVRS) de los niños con alguna patología física es más desfavorable, en comparación con muestras de niños y adolescentes sanos. Sin embargo, la CVRS se ve afectada por estados de ánimo negativos como la ansiedad y la depresión 3, o por autoesquemas como la autoimagen y la autoestima4. Por lo tanto, es necesario evaluar la calidad de vida relacionada con la salud en niños y adolescentes.
Como consecuencia, la Comisión Europea financió la creación de The Kidscreen Questionnaire, un test que mide la calidad de vida relacionada con la salud para niños y adolescentes de entre 8 y 18 años. Esta es la primera prueba para niños y adolescentes que fue desarrollada y probada en muchos países con una amplia muestra representativa de menores, por lo tanto, da una perspectiva más amplia sobre la comprensión e interpretación de la CVRS en diferentes países5.
En América Latina, se han realizado varios estudios en relación con la validez y fiabilidad, por ejemplo, los estudios en México6, en Argentina7, en Brasil8 o en Chile9,10. Mientras tanto, las propiedades psicométricas de The Kidscreenof HRQOL han sido evaluadas con éxito en estudios previos en Colombia, por ejemplo, The Kidscreen-27 en la ciudad de Medellín11, y The Kidscreen-52 con niños con enfermedades crónicas12, además de la validación lingüística ajustada de la versión colombiana de The Kidscreen-5213. Sin embargo, no existen estudios que comprueben las propiedades psicométricas de The Kidscreen-52 en niños y adolescentes que no presentan ningún tipo de patología física, que es en realidad la versión más utilizada a nivel mundial y nacional. Por esta razón, el objetivo del presente estudio fue evaluar la confiabilidad y validez de constructo de la medida de calidad de vida The Kidscreen-52 en una muestra de niños y adolescentes colombianos.
Método
Diseño
La presente investigación es un estudio metodológico cuantitativo14 ya que se interesa por comprobar las cualidades métricas de la escala, en este caso El Kidscreen-52 en población infantil y juvenil colombiana.
Participantes
En total, 1155 niños y adolescentes voluntarios, de los cuales 615 eran hombres (53,2%) y 540 mujeres (46,8%), con edades entre 10 y 17 años (Media: 13,94; DE: 1,370) y con niveles socioeconómicos medio y bajo (dos y tres). El 87,7% de los participantes (1013) declaró no tener ningún tipo de diagnóstico, el 4,8% tenía diagnósticos visuales (miopía o astigmatismo), el 3,5% tenía asma u otras alergias respiratorias y el resto padecía otras enfermedades que no disminuían su capacidad para responder a la escala.
Instrumentos
Cuestionario de salud y bienestar en niños y adolescentes (Kidscreen-52): la versión original fue desarrollada por el grupo europeo Kidscreen15, y existe una adaptación lingüística para Colombia (Colombia Kidscreen-52)16. Este cuestionario tiene diez dimensiones y 52 ítems que se responden en una escala tipo Likert con cinco alternativas de respuesta («nunca» a «siempre») para las dimensiones: bienestar psicológico, estados de ánimo y emociones, autopercepción, autonomía, vida familiar, recursos económicos, pares y apoyo social, ambiente escolar, aceptación social. Por su parte, la dimensión bienestar físico tiene un sistema de respuestas tipo Likert con cinco alternativas que van de «excelente» a «malo».
Procedimiento
Con el permiso previo de los representantes legales de los colegios que participaron en el estudio, el siguiente paso fue la recogida de la muestra. En primer lugar, se informó a los padres/tutores legales de la finalidad del estudio y, a continuación, se informó del estudio a los adolescentes cuyos padres habían autorizado previamente su participación. Se aclaró tanto a los padres/tutores legales como a los niños y adolescentes que podían retirarse del estudio en cualquier momento y que no recibirían ningún tipo de compensación económica. Los niños y adolescentes que libre y voluntariamente decidieron participar fueron reunidos en grupos en las instalaciones de cada institución educativa. Se les entregaron las diferentes pruebas psicométricas, como la ficha de datos sociodemográficos, para que las contestaran individualmente, además de contar con la ayuda del investigador encargado siempre que lo requirieran. El proceso de aplicación duró 30 minutos.
En cuanto al plan de análisis, se desarrolló el análisis factorial exploratorio, que se realizó con un método de extracción de mínimos cuadrados ponderados y un método de rotación Equamax, posteriormente, se realizaron análisis factoriales confirmatorios con métodos de estimación de mínimos cuadrados ponderados diagonalizados17, métodos de análisis robustos (que superan la dificultad de la no normalidad multivariante17, más la estandarización de las variables latentes. Por último, el análisis de fiabilidad (alfa de Cronbach, omega de McDonald, valores de Guttman y Greatest Lower Bound) mediante el programa JASP versión 0.14
Resultados
Para determinar si el tamaño de la muestra era adecuado, se utilizaron las pruebas de Kaiser-Meyer-Olkin y de esfericidad de Bartlett para analizar la muestra; se comprobó que el tamaño de la muestra era suficiente (KMO = .954) y que presentaba una matriz de correlaciones ajustada (Bartlett x2 = 31592,078; df = 1326; p .000), lo que apoyaba la viabilidad de un análisis factorial. Inicialmente, los valores de unicidad sugerían extracciones de valor superiores a 0,35 para todos los ítems, por lo que todos se conservaron. La tabla 1 muestra el número de factores (determinado tanto por la regla de los autovalores de Kaiser superiores a 1 como por el análisis paralelo de Horn) y su variación explicada.
En relación con los factores, se encontraron 10 factores claramente formados (Tabla 1), que consiguieron explicar el 53,86% de la variación acumulada. No obstante, la Tabla 2 refleja la distribución de ítems obtenida para cada factor tras el análisis factorial. Para una mejor comprensión de estas distribuciones, en la parte izquierda de la tabla aparece el número del ítem y el área teórica a la que corresponde.
Como se muestra en la Tabla 2, la distribución de ítems es adecuada para los 10 factores fundados, donde 51 de los 52 ítems se ubican en el área teórica a la que corresponde, sin embargo, con el ítem 38-¿Has pasado tiempo con tus amigos/as?- esto no sucedió (pertenece conceptualmente a la dimensión amigos, y cargó en la dimensión Tiempo libre, que también tiene coherencia de acuerdo a la referencia del tiempo del que el niño dispone). Para verificar el modelo propuesto, a continuación, se muestra el análisis factorial confirmatorio, los índices de ajuste del modelo se reportan en la Tabla 3.
Como se muestra en la Tabla 3, los indicadores de ajuste del modelo oscilan entre adecuado y alto, lo que reafirma la coherencia entre la distribución teórica y empírica como evidencia de la validez de constructo de la escala. Por otro lado, se realizaron análisis de consistencia interna, cuyos resultados se muestran en la Tabla 4.
Como se muestra en la Tabla 4, se encontraron valores de consistencia interna entre .947 y .984, lo que indica valores altos para la escala completa, y valores entre aceptables (factor 4) y altos para cada una de las dimensiones, también se encontraron correlaciones superiores a 0.3 entre los ítems y el total corregido, los valores de consistencia se vieron afectados tras una hipotética eliminación de cada ítem y correlaciones superiores a 0.4 entre todos los ítems pertenecientes a cada factor.
Discusión
La Calidad de Vida Relacionada con la Salud se ha convertido en un importante indicador de las condiciones de vida de niños y adolescentes, y la necesidad de medirla objetivamente ha posicionado al Kidscreen como una estrategia multidimensional y de fácil aplicación para evaluar estos términos5, lo que resalta la necesidad de comprobar su calidad métrica en muestras sin condiciones patológicas o médicas, línea a la que contribuye este estudio.
Los resultados del presente estudio muestran que el Kidscreen es una escala compuesta por 10 factores, que explican el 53,86% de varianza, que sus ítems se organizan de acuerdo con la propuesta teórica previamente establecida, y que presenta adecuados índices de consistencia interna y fiabilidad. Así, se puede concluir que el Kidscreen-52 es una escala válida y confiable para medir la calidad de vida de los niños y adolescentes colombianos.
El número de factores obtenidos, así como las distribuciones de los ítems a estos factores va en línea con la propuesta original5, y los índices de bondad de ajuste obtenidos en los análisis factoriales confirmatorios son similares a los estudios previos realizados en 13 países de la Unión Europea 18, así como en Argentina7, China19, o Irán22.
Asimismo, los valores de consistencia interna superiores a 0,7 concuerdan con los estudios que revisaron dicha consistencia7,18,19,21,22. Los datos de fiabilidad anteriores y las estructuras factoriales nos llevan a pensar que la escala Kidscreen-52 es una prueba que mantiene su calidad métrica en contextos culturales diversos, y sus criterios de evaluación son posiblemente invariantes a pesar de las condiciones de cada país, lo que sugiere su uso transnacional.
Cabe destacar que el presente estudio presenta una serie de limitaciones. La primera es que la muestra fue obtenida principalmente de la zona central del país, sumado a que pertenecían a niveles socioeconómicos bajos y medios. Por lo tanto, esto no permite la generalización de los resultados a toda Colombia. Por esta razón, se recomienda la replicación de los resultados en diversos contextos nacionales, con muestras más variadas, para garantizar la invariabilidad según el contexto de aplicación.
Finalmente, los datos nos permiten referir que la escala Kidscreen-52, en su versión adaptada, es una prueba válida y confiable para evaluar la calidad de vida en niños y adolescentes en Colombia. A futuro, se recomienda continuar estudiando la calidad de vida en nuestra población infantil y adolescente, estos estudios no solo deben ser descriptivos, sino que deben buscar encontrar variables mediadoras a dicha calidad de vida y poder proponer intervenciones para mejorar sus condiciones de vida.