Antecedentes y justificación
El Laboratorio de Vidrio es uno de los once laboratorios de materiales del Área Tecnológica de la Escuela Universitaria Centro de Diseño (EUCD), que depende de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU). Este ámbito ha realizado experiencias de enseñanza sobre el vidrio como material de diseño desde 2010. Así, el laboratorio se propone como espacio de investigación y relacionamiento con el medio, a través de actividades de intercambio con artistas, fábricas y museos nacionales vinculados al material como ámbitos no tradicionales de enseñanza del vidrio (Amorín y Rava, 2013).
Desde su conformación, el Laboratorio de Vidrio está integrado por un equipo académico estable, además de contar con estudiantes practicantes de enseñanza (excolaboradoras2 honorarias) de forma regular. En la actualidad, tiene a su cargo Laboratorio de Vidrio I y II, unidades curriculares del segundo y tercer año de la Licenciatura en Diseño Industrial. A su vez, se desarrollan actividades de investigación y extensión en diferentes espacios y proyectos en los que también participan estudiantes de la licenciatura en modalidad de prácticas.
Amorín (2019) afirma que entre 2014 y 2019 veintiún estudiantes internacionales de intercambio provenientes de Argentina, Chile, México, España, Portugal y Francia formaron parte de la experiencia; la elección del laboratorio se basó en la inexistencia de ámbitos de trabajo con este material en sus universidades de origen. La autora expresa que durante el proceso forman parte de un equipo pequeño junto a estudiantes nacionales; el desafío primario es integrarse y entenderse, superando las dificultades en la comunicación para la concreción de las tareas. En este sentido, quienes lo integran ponen en práctica herramientas técnicas y de socialización entre sí, con el equipo docente, con actoras locales, con relación al material, para resolver problemas concretos.
En 2019, la convocatoria de Innovaciones Educativas en las Distintas Modalidades de la Enseñanza, de la Comisión Sectorial de Enseñanza (CSE), Universidad de la República (Udelar), financió el proyecto “Prácticas contemporáneas de diseño en vidrio”. Este propuso al Laboratorio de Vidrio en sus unidades curriculares como un espacio de innovación donde se profundizó en prácticas proyectuales de enseñanza con el vidrio como material principal.
En este marco, se plantearon innovaciones en diversos sentidos. Por un lado, la integración de docentes de otros laboratorios de materiales de la EUCD al equipo del Laboratorio de Vidrio. Por otro lado, la participación de emprendedoras relacionadas con el material para transitar las unidades curriculares que el Laboratorio de Vidrio desarrolla y formar parte de equipos de estudiantes de la licenciatura. Por último, se planteó la articulación entre el Área Tecnologías y Ciencias de la Naturaleza y el Hábitat y el Área Social Artística, mediante la incorporación de una docente y cuatro estudiantes de Facultad de Artes (ex Escuela Nacional de Bellas Artes) a dichas unidades curriculares.
Surge del informe inédito del proyecto mencionado entregado a CSE en mayo del 2022 que la participación de emprendedoras y estudiantes de otras carreras (en adelante actoras externas) en las unidades curriculares impactó en las estrategias de enseñanza. Se destacan el desafío de comunicación con relación al diálogo y la realización de acuerdos de trabajo entre estudiantes, emprendedoras y estudiantes de Facultad de Artes. A partir de las valoraciones primarias de este proyecto, se mantuvo la incorporación de una o dos actoras externas a la universidad hasta julio de 2023.
Si bien no se encontraron antecedentes específicos de este tipo de participación, es de destacado interés para diversos autores, como Hernández (2013) y Freire (2000), que las universidades puedan abrirse a su entorno y colaborar con actores externos para enriquecer la experiencia educativa y promover el desarrollo local.
Por otro lado, en el marco de la escritura del capítulo “Tecnología y diseño: el vidrio en territorio”, para el libro Las formas de la desigualdad, los modos de lo común: Experiencias universitarias, publicado por el Espacio Integral Metropolitano, el equipo docente realizó entrevistas semiestructuradas grupales a emprendedoras y estudiantes de la licenciatura. Entre sus objetivos se apuntó a recabar datos empíricos referentes a la percepción de las participantes en torno al intercambio de conocimiento en espacios de articulación de las funciones universitarias de enseñanza, investigación y extensión (Amorín et al., 2022).
Además, el Laboratorio de Vidrio ha propuesto sus unidades curriculares como electivas para estudiantes de otras carreras del Área de Tecnologías y Ciencias de la Naturaleza y el Hábitat, en concordancia con las definiciones institucionales a través Movete en la Udelar.3 La movilidad horizontal que esta definición propone contribuye a la transformación de la enseñanza tal como se desarrolla, promoviendo vínculos estrechos entre estudiantes de diversas carreras y servicios de la Udelar que apuntan a favorecer la colaboración entre disciplinas.
Reconocemos en este sentido la recurrencia de la participación de estudiantes de otras carreras en la Licenciatura en Diseño Industrial, formando parte de equipos de estudiantes que cursan las unidades curriculares. Es así que resaltamos la pertinencia de entender desde la perspectiva estudiantil cómo impacta en la enseñanza-aprendizaje y las dinámicas universitarias esta integración y reflexionar acerca de las condiciones para mejorar las prácticas en este contexto.
Según Edelson (2002), para que los productos de investigaciones en educación puedan ser implementados en el diseño, deben ser generados para este propósito específicamente. Es así que el análisis de las prácticas de la disciplina contribuye a mejorar la enseñanza de grado en este campo disciplinar específico.
Objetivos generales y específicos
Generales
Evaluar la integración de estudiantes del Área Tecnologías y Ciencias de la Naturaleza y el Hábitat que llegan a través de Movete en la Udelar a las unidades curriculares del Laboratorio de Vidrio y del proyecto “Prácticas contemporáneas de diseño en vidrio”.
Conocer la perspectiva de estudiantes de la Licenciatura en Diseño Industrial perfil Producto con relación a la integración en el espacio del aula de actoras externas que contribuya a la evaluación de las prácticas de enseñanza-aprendizaje universitaria.
Específicos
Caracterizar y reconocer las percepciones de estudiantes de la Licenciatura en Diseño Industrial perfil Producto sobre la integración en el espacio del aula de actoras externas.
Determinar aspectos facilitadores u obstaculizadores en los equipos de trabajo que estudiantes de la licenciatura reconocen en el espacio del aula con la integración de actoras externas que inciden en la enseñanza-aprendizaje según su formación.
Conocer desde la perspectiva estudiantil de la licenciatura la incidencia de la participación de las actoras externas en la toma de decisiones que suponen los ejercicios en equipos que propone el Laboratorio de Vidrio con relación a la enseñanza del diseño.
Metodología
Para cumplir con los propósitos de esta investigación se planteó un abordaje metodológico cualitativo cuya forma de obtener la información fue a través de grupos focales. Según Gutiérrez Brito (2008), esta herramienta de investigación surge a partir de entrevistas individuales en profundidad que ven en el grupo una forma de potenciar la interacción. Así también, Kotler, Armstrong, Saunders y Wong (2001), citados por Juan y Roussos (2010), argumentan que los grupos focales pueden generar nuevas ideas o conexiones a partir de comentarios que inicialmente parecen azarosos.
Los grupos focales que se desarrollaron en la investigación que aquí se presenta estuvieron integrados por estudiantes de la Licenciatura en Diseño Industrial que compartieron un equipo de trabajo con alguna de las actoras externas antes mencionadas, durante 2020, 2021 y 2022, en las unidades curriculares de Laboratorio de Vidrio I y II. Se llevaron a cabo cuatro sesiones de entre seis y siete participantes, abarcando las perspectivas de veintitrés estudiantes de un total de cincuenta que realizaron actividades en el proyecto “Prácticas contemporáneas de diseño en vidrio”. Se procuró la conformación de grupos focales con estudiantes que hubieran formado equipo con actoras con diversidad de formación.
Se optó por el uso de una aplicación de mensajería instantánea para teléfonos inteligentes (WhatsApp) como método de contacto inicial debido a su cercanía con quienes estudian, ya que es una plataforma que se alinea con las preferencias de este rango etario. Inicialmente, se envió un mensaje general para establecer el contacto; sin embargo, al recibir respuestas limitadas, se decidió personalizar el enfoque y enviar un mensaje individual a cada estudiante. Esta estrategia permitió concretar los grupos focales en horarios de conveniencia para quienes participaron y para el equipo de investigadoras.
Los cuatro grupos focales tuvieron una duración de noventa minutos aproximadamente y se desarrollaron en el Laboratorio de Vidrio localizado en la FADU en los meses de julio y agosto. Esta decisión temporal respondió a atender las actividades académicas estudiantiles ubicando los grupos focales en la última semana de receso y la primera semana de clases del segundo semestre como forma de evitar la superposición con otras actividades de grado.
Se elaboró la siguiente secuencia de preguntas (tabla 1) atendiendo los objetivos planteados en el proyecto.
Tabla 1: Tabla de preguntas y objetivos correspondientes planteados en el proyecto

Fuente: Elaboración propia en el marco del proyecto “Estudiantes en foco: Movete hacia el diseño”.
Se utilizó una dinámica que incluyó tarjetas impresas con las preguntas numeradas que fueron entregadas a quienes participaron con la consigna de leerlas en orden y en voz alta y contestarlas en grupo (figura 1).
Se utilizó Whisper4 para realizar el desgrabado de los grupos focales, una herramienta de inteligencia artificial especializada en la transcripción automatizada de audio a texto que emplea algoritmos avanzados de procesamiento y reconocimiento del lenguaje natural.
El uso de esta herramienta permitió agilizar el proceso de análisis de datos, facilitando la revisión y la extracción de información relevante de las discusiones de los grupos focales. Además, al eliminar la necesidad de transcripción manual, se redujeron significativamente el tiempo y los recursos requeridos para completar esta tarea, lo que permitió profundizar en el análisis e interpretación de los resultados obtenidos.
El análisis cuantitativo se centró en la participación estudiantil en equipos heterogéneos, considerando su evolución a lo largo de diversos cursos entre 2020 y 2022. Se recolectaron datos sobre la composición de los equipos, la formación de las integrantes externas y su impacto en el grupo. Este enfoque permitió identificar patrones de integración y colaboración en las distintas etapas del proyecto, lo que proporcionó una base para evaluar las implicaciones de estas experiencias en el desarrollo académico de las estudiantes.
Análisis
En la siguiente sección, se presentan datos cuantitativos de la participación estudiantil en los proyectos “Prácticas contemporáneas de diseño en vidrio” y “Estudiantes en foco: Movete hacia el diseño”, tomando como criterio la formación de la actora externa con quien formaron equipo. Además, se expone parte del análisis cualitativo que surge del intercambio en los grupos focales, centrado en identificar la perspectiva estudiantil con relación a la inclusión de actoras externas en el espacio de aula. Para ello se agruparon las percepciones y experiencias compartidas en los grupos focales en tres dimensiones, siguiendo como criterio la formación de la actora externa con quien las estudiantes formaron equipo: emprendedoras, estudiantes de Facultad de Artes y estudiantes de Movete en la Udelar. Este enfoque permite comprender cómo las estudiantes perciben y valoran su participación en equipos heterogéneos, así como las implicaciones de estas experiencias en su desarrollo académico.
La tabla 2 muestra la cantidad de estudiantes que formaron equipo con emprendedoras y estudiantes de Facultad de Artes y otras facultades a través de Movete en la Udelar. La tabla desglosa estos datos según la unidad curricular y el año en que cursaron entre julio 2020 y diciembre 2022.
Tabla 2: Tabla numérica de estudiantes que formaron equipo con actoras externas entre julio 2020 y diciembre 2022

Fuente: Elaboración propia a partir de los datos de los proyectos “Prácticas contemporáneas de diseño en vidrio” y “Estudiantes en foco: Movete hacia el diseño”.
Vale aclarar que la cantidad de estudiantes implicadas en equipos con emprendedoras es mayor en 2020 debido a que fue el año en el que tuvo inicio el proyecto “Prácticas contemporáneas de diseño en vidrio”, con la participación de seis emprendedoras en el Laboratorio de Vidrio. Al transcurrir el tiempo, ese número disminuyó y se equiparó paulatinamente con el de otras actoras externas de Facultad de Artes y de otras facultades a través de Movete en la Udelar al terminar el financiamiento del proyecto.
“Estudiantes en foco: Movete hacia el diseño” implicó el desarrollo de cuatro grupos focales de entre seis y siete participantes, abarcando las perspectivas de veintitrés estudiantes de un total de cincuenta que realizaron actividades en el proyecto “Prácticas contemporáneas de diseño en vidrio”.
En la tabla 3 se presenta la cantidad de estudiantes que participaron en los grupos focales según el año, la unidad curricular y el tipo de actora externa con la que formaron equipo.
Tabla 3: Tabla numérica de estudiantes que formaron equipo con actoras externas entre julio 2020 y diciembre 2022 y participaron de los grupos focales que esta investigación implicó

Fuente: Elaboración propia a partir de los datos de los proyectos “Prácticas contemporáneas de diseño en vidrio” y “Estudiantes en foco: Movete hacia el diseño”.
Es necesario aclarar que algunas estudiantes compartieron grupo con actoras externas en Laboratorio de Vidrio I y Laboratorio de Vidrio II. Así, esta doble participación cuantifica a una misma persona dos veces, pero fueron convocadas para un único grupo focal.
Debido al alcance de este artículo, se presenta a continuación un análisis cualitativo parcial de los grupos focales como parte del material empírico que surgió de la investigación. En tal sentido, se agruparon las percepciones y experiencias compartidas en tres dimensiones según el criterio mencionado. Así también, se seleccionaron recortes concretos8 del discurso de quienes estudian que dan cuenta de las percepciones analizadas. En acuerdo con Silveira y otros (2015), resaltamos que para el proceso de análisis la inferencia fue fundada en la presencia de palabras, temas, frases y sus significados, y no en la frecuencia de aparición. Figura 2.
Por un lado, las estudiantes que trabajaron con emprendedoras coinciden en que su inclusión en los equipos contribuye a comprender otras perspectivas del proceso vinculado a los ejercicios que tienen por objetivo el aprendizaje del diseño. Es así que aportan conocimientos técnico-prácticos relacionados con el vidrio, experiencias del mundo real y enfoques diferentes a los estudiantes de diseño. Esta variedad en las perspectivas enriquece el proceso creativo y permite a quienes estudian ver más allá de su entorno académico.
Quienes estudian comentan con relación a esta temática:
“… eso como que en primero lo vas aprendiendo a hacer, en segundo lo tenés un poco más claro, y como que lo reforzamos, teniendo que explicarle a ella más o menos cómo manejar un proceso de diseño. Para mí eso de poder explicarle a otra persona que en ese momento no tenía acceso (…) fue un desafío que estuvo muy bueno, y ahí te das cuenta también, (…) reforzó lo que vos estás entendiendo y lo que estás haciendo en el proceso, para mí eso fue bueno.” (GF 31/7/2023)
“… ella lo que aportaba era su experiencia personal de trabajar de artesana con vidrio, que estuvo bueno porque nos enseñó técnicas, digamos, que quizás no las podíamos aprender de otra forma…” (GF 31/8/2023)
“Me acuerdo de una cosa muy puntual: que para pintar ella tiraba una gotita arriba del vidrio y lo hacía así. Y si iba más rápido o iba lento (…) Tenías que pintar de ese lado.” (GF 31/8/2023)
A su vez, el trabajo en equipo con las emprendedoras en las diferentes etapas que componen el proyecto muestra diferencias en la metodología, enfoques y objetivos académicos que colaboran con el aprendizaje y conforman oportunidades de aprender a interactuar con personas de diferentes contextos, lo que diversifica sus habilidades de comunicación.
Sin embargo, también señala las dificultades de comunicación y colaboración, especialmente cuando las emprendedoras tienen una visión establecida de su trabajo y pueden tener expectativas diferentes sobre el rol de la estudiante en el proceso académico. En este sentido, se señalan diferencias en el lenguaje y los términos técnicos vinculados a las tecnologías que son de uso común para el diseño industrial pero no para las emprendedoras que participan en los equipos.
Es así que se refieren a estos aspectos y lo enuncian del siguiente modo:
“Pero hay cosas que nosotros estamos reacostumbrados y las tenemos reinternalizadas. Y claro, cuando viene alguien de afuera, no está acostumbrado a trabajar así, o presentar los trabajos de la misma manera.” (GF 31/07/2023)
“… también que los tiempos que manejaban, otros tiempos, otros ritmos de trabajo que la entrega era la clase siguiente y como que seguíamos trabajando en cosas del principio (…) eso se hizo un poco complicado.” (GF 25/7/2023)
Por otro lado, quienes trabajaron con estudiantes de Facultad de Artes reconocen que enfrentaron desafíos para desarrollar las tareas solicitadas con relación a las diferencias en la formación y la perspectiva.
En este sentido, mencionaron diferencias marcadas en la forma de abordar los proyectos, dado que la disparidad entre el abordaje artístico y el vinculado con lo tecnológico y funcional dificultaba la toma de decisiones para la concreción del ejercicio.
En este sentido, las estudiantes plantean que:
“… se notaba que teníamos (…) diferencias de cómo llevar adelante los proyectos, digamos (…) estaba muy (…) desde lo abstracto del arte y no tanto (…), capaz que nosotros queríamos ir más como a cosas más técnicas, funcionalidades, etcétera.” (GF 31/8/2023)
A su vez, la experiencia de compartir equipo con alguien de otra disciplina supuso comprender y explicar las dinámicas propias de su formación, al mismo tiempo que compararon y contrastaron las particularidades de ambas. Del mismo modo, se resaltó como aspecto positivo la necesidad de explicar conceptos y técnicas que ya dominaban, aprendidos en la unidad curricular anterior, como el corte recto y curvo de vidrio plano, lo cual implicó un ejercicio de síntesis y comunicación efectiva para transmitir ese conocimiento a otra persona.
“Sí, estuvo bueno compartir con personas de otra carrera, también entender o explicar cómo se manejan las cosas en nuestra carrera y capaz de comparar un poco las diferencias que se pueden llegar a encontrar. Para mí algo que estuvo bueno fue como el tener que explicarle cosas que nosotros ya sabíamos, porque nosotros habíamos hecho Vidrios I y estamos haciendo Vidrios II con la emprendedora. No era emprendedora, ella era estudiante, pero estaba bueno que (…), como nosotros (…) ya habíamos cortado vidrio plano y teníamos que cortar de vuelta, el intentar explicarle a ella cómo se hacía (…), en lugar de ir a preguntarles a ustedes. Nosotros intentábamos explicar primero, era difícil, (…) pero estaba bueno eso como de intentar pasar lo que sabíamos, a ver si lo podíamos resolver entre nosotras.” (GF 31/7/2024)
Por último, quienes compartieron equipo con estudiantes de arquitectura comentan sobre la complementariedad de las habilidades, reconociendo la diversidad de perspectivas que pueden aportar. También reconocen la necesidad de establecer una comunicación clara y trabajar en equipo para superar las diferencias en la formación y la perspectiva, buscando aprovechar la diversidad de conocimientos para fortalecer el trabajo conjunto.
Con relación a la participación con estudiantes de arquitectura dicen;
“Fue como que tuvimos que aprender a explicar lo que nosotros ya sabíamos hacer. Y entender lo que no sabíamos hacer, para poder explicárselo a ella, que no había hecho el taller anterior. Entonces eso estuvo bueno.” (GF 31/8/2023)
“Siento que en el grupo sumó (…) Fue como un equilibrio. Nosotras veníamos ya (…) de Vidrio I, con un poco de conocimiento, y balanceamos la experiencia con lo que ella sabía de arquitectura. Entonces tuvo que hacer moldes. Ella puso toda la parte de cálculos, y que salga el molde bien a la primera. Aunque hubo unas fallas, pero ella iba como perfeccionándolo. Y bueno. Fue como un balance… Fue como un buen balance que hicimos. Y nada, ese equilibrio fue lo que sacó a flote el desafío que teníamos por cumplir con la entrega.” (GF 31/7/2023)
Reflexiones finales
Para finalizar, queremos señalar algunos aspectos transversales que fueron mencionados por estudiantes que compartieron equipo con emprendedoras, con estudiantes de Facultad de Artes o con estudiantes de Movete en la Udelar, indistintamente. Es decir, los comentarios y observaciones se aplican de manera general, independientemente del grupo con el que hayan compartido equipo.
Durante los primeros años de formación en Diseño Industrial, quienes estudian adquieren conocimientos sobre los procesos de diseño, tanto técnicos como conceptuales, que son la base para su desarrollo académico en el campo disciplinar. Sin embargo, se desprende de los grupos focales realizados que frecuentemente no son conscientes de los saberes adquiridos, y manifiestan reconocerlos al interactuar con quienes carecen de esta formación. La participación en actividades como las propuestas por el Laboratorio de Vidrio proporciona un ámbito donde ponerlos en práctica de manera concreta, lo que contribuye a reconocer y valorar sus propios saberes.
Algunas estudiantes reconocen que la formación en Diseño Industrial tiende a homogeneizar los conocimientos y habilidades, como si todos fueran “cortados con la misma tijera”. Esta percepción plantea la existencia de reglas implícitas o de una estructura formativa que se les hace evidente al integrar un equipo con actoras externas. Sin embargo, esta homogeneización es la base para la profundización en los conocimientos disciplinares avanzados.
Así también, quienes estudian perciben que la experiencia de enseñar o explicar conceptos sobre vidrio y diseño refuerza los propios conocimientos. Al tener que explicar de manera clara y concisa los procesos y conceptos que han aprendido, quienes estudian pueden consolidar su comprensión y mejorar su capacidad para comunicar ideas complejas de manera efectiva. Tal como afirma Vygotsky (1978), el aprendizaje ocurre a través de la interacción social, y cuando los individuos son capaces de explicar verbalmente un concepto o idea a otros, están internalizando y consolidando ese conocimiento.
Además, participar de los grupos focales en esta investigación sobre enseñanza universitaria les proporcionó un entorno propicio para reflexionar sobre sus experiencias. Esto permitió identificar fortalezas y áreas de mejora en su formación, así como valorar la importancia de la colaboración y el intercambio de conocimientos en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Además, esta experiencia reflexiva permitió a quienes participaron apropiarse y comprender sus formas de aprender.
















