SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.13 número3Preguntas hacia la comunalización de lo público a nivel local como desafío para las alternativas a lo manicomialEmprendimientos sociales y salud comunitaria: Transformaciones subjetivas en experiencias de cooperación social índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Links relacionados

Compartir


Psicología, Conocimiento y Sociedad

versión On-line ISSN 1688-7026

Psicol. Conoc. Soc. vol.13 no.3 Montevideo dic. 2023  Epub 01-Dic-2023

https://doi.org/10.26864/pcs.v13.n3.4 

Trabajos originales

Los desafíos del acompañamiento universitario a emprendimientos de gestión colectiva en procesos de desmanicomialización en Uruguay

Os desafios do acompanhamento universitário a empreendimentos de gestão coletiva em processos de desinstitucionalização no Uruguai

The challenges of university accompaniment to collective management undertakings in deinstitutionalization processes in Uruguay

Dulcinea Cardozo Carrero1 
http://orcid.org/0000-0001-5244-0241

1Universidad de la República, Uruguay Autora referente: dulcinea.cardozo@gmail.com


Resumen:

Nos proponemos compartir resultados de una investigación que tuvo como objetivo estudiar los procesos de gestión colectiva en dos emprendimientos laborales autogestivos de Uruguay, que trabajan desde la perspectiva de la desmanicomialización. Se trató de una investigación cualitativa, situada y experiencial a partir del despliegue de una etnografía. En este artículo abordaremos los resultados de dos objetivos específicos, uno sobre las estrategias y metodologías universitarias vinculadas a los procesos de conformación y sostén de dichas experiencias y otro sobre las estrategias desplegadas para acompañar el padecimiento de lxs integrantes. Compartiremos algunos resultados en relación a las preguntas: ¿para qué y por qué se acompaña? ¿qué es lo que se acompaña? ¿cómo se acompaña?. Identificamos que ambos proyectos se llevan adelante desde la extensión universitaria, a partir de un proceso de incubación de emprendimientos cooperativos integrado solo por personas usuarias de servicios de salud mental, que denominamos: autogestión-solo-de-ellos. Este proceso implicó acompañar y sostener un doble pasaje, o sea generar ruptura con la lógica manicomial y con la lógica salarial para configurar y consolidar un emprendimiento de gestión colectiva. Esto significó para los equipos universitarios acompañar y desplegar distintas estrategias en relación a la triada: trabajo-acogida-vida. Destacamos tres componentes transversales del acompañamiento que fueron: no sustituir (hacer con), sostener otras temporalidades y abordaje interdisciplinario y en red.Durante el proceso de incubación se produce una metamorfosis a partir de que egresadxs universitarixs deciden integrar las experiencias como socixs/cooperativistas e inician un proceso que definimos como: autogestión-de-un-nosotrxs.

Palabras clave: Acompañamiento; incubación de emprendimientos; gestión colectiva; desmanicomialización

Resumo:

Propomos compartilhar resultados de uma pesquisa que teve como objetivo estudar os processos de gestão coletiva em duas empresas trabalhistas autogeridas no Uruguai, que funcionam na perspectiva da desmanicomalização. Tratou-se de uma investigação qualitativa, situada e experiencial baseada no desdobramento de uma etnografia. Neste artigo abordaremos os resultados de dois objetivos específicos, um sobre as estratégias e metodologias universitárias vinculadas aos processos de formação e sustentação dessas experiências e outro sobre as estratégias utilizadas para acompanhar o sofrimento dos membros. Compartilharemos alguns resultados em relação às questões: para que e por que é acompanhado? O que é acompanhado? E como é acompanhado? Identificamos que ambos os projetos são realizados pela extensão universitária, a partir de um processo de incubação de empreendimentos cooperativos formados apenas por usuários de serviços de saúde mental, o que denominamos: autogestão-só-deles. Este processo envolveu acompanhar e sustentar uma dupla passagem, ou seja, gerar uma ruptura com a lógica asilar e com a lógica salarial para configurar e consolidar um empreendimento de gestão coletiva. Isso significou que as equipes universitárias acompanhassem e implantassem diferentes estratégias em relação à tríade: trabalho-acolhimento-vida. Destacamos três componentes transversais do apoio, que foram: não substituir (fazer com), apoiar outras temporalidades e uma abordagem interdisciplinar e em rede. Durante o processo de incubação, ocorre uma metamorfose quando os graduados universitários decidem integrar as experiências como parceiros/cooperativistas e iniciam um processo que definimos como: autogestão-de-um-nós.

Palavras chaves: Acompanhamento; incubação de empreendimentos; gestão coletiva; desinstitucionalização

Abstract:

We propose to share results of a research that aimed to study the collective management processes in two self-managed labor enterprises in Uruguay, which work from the perspective of demanicomalization. It was a qualitative, situated and experiential investigation based on the deployment of an ethnography. In this article, we will address the results of two specific objectives, one on the university strategies and methodologies linked to the processes of formation and support of these experiences and another on the strategies deployed to accompany the suffering of the members. We will share some results in relation to the questions: why and what for is it accompanied? What is accompanied? And how is it accompanied? We identified that both projects are carried out by the university extension, based on an incubation process of cooperative ventures made up only of users of mental health services, which we call: self-management-only-of-them. This process involved accompanying and sustaining a double passage; that is, generating a break with the asylum logic and with the salary logic to configure and consolidate a collective management undertaking. This meant for the university teams to accompany and deploy different strategies in relation to the triad: work-welcome-life. We highlighted three transversal components of support, which were not substituting (doing with), supporting other temporalities, and an interdisciplinary and network approach. During the incubation process, a metamorphosis occurs when university graduates decide to integrate the experiences as partners/cooperativists and begin a process that we define as: self-management-of-an-us.

Keywords: Accompaniment; incubation of enterprises; collective management; deinstitutionalization

Este artículo se desprende de la investigación Desmanicomialización en el Uruguay: experiencias de gestión colectiva en dos emprendimientos de trabajo-acogida-vida, realizada en el marco de la Maestría en Psicología Social (UdelaR) entre el 2014-2018 y tuvo como objetivo general estudiar el proceso de gestión colectiva en emprendimientos laborales, que se desarrollan desde la perspectiva de la desmanicomialización, a partir de dos colectivos de Uruguay: la Cooperativa Social Riquísimo Artesanal y el Espacio Cultural Bibliobarrio. Los objetivos específicos: a) Caracterizar y analizar los dispositivos para la gestión colectiva en Riquísimo Artesanal y en el Espacio Cultural Bibliobarrio; b) Identificar y analizar las estrategias y metodologías universitarias vinculadas a los procesos de conformación y sostén de dichas experiencias; c) Identificar las estrategias y dispositivos desplegados para acompañar el padecimiento (de lo) psiquiátrico de los integrantes. En este artículo abordaremos los dos últimos objetivos, profundizando sobre: ¿para qué y por qué se acompaña?, ¿qué es lo que se acompaña?, ¿cómo se acompaña en estas propuestas?

A su vez, esta investigación es parte del trabajo que vengo realizando como docente universitaria (en la Universidad de la República) y militante antimanicomial, por tanto está entrelazada con mis prácticas de extensión, enseñanza y militancia en el campo de problemas de la desmanicomialización en el Cono Sur, en particular en propuestas vinculadas al trabajo llevadas adelante de forma colectiva.

En Uruguay, se aprueba en el año 2017 una nueva Ley de Salud Mental (Uruguay, 2017), que implica el cierre de los hospitales psiquiátricos para el 2025, la creación de una red territorial de servicios sanitarios, y la creación de propuestas de trabajo y de vivienda. Pasaron más de cinco años y hay pocos avances en la reglamentación, enfrentándonos a grandes desafíos en su implementación, y a la pregunta enunciada en los distintos procesos de reformas psiquiátricas y luchas por la desmanicomialización en la región: ¿qué abrir para cerrar los manicomios?

Las reivindicaciones por el derecho al trabajo se han tornado centrales en los movimientos de desmanicomialización y el desarrollo de emprendimientos de la economía social y solidaria como parte de los procesos de desmanicomialización en la región ha ido creciendo en los últimos 15 años (Cardozo, 2021). Pasando a configurarse como una estrategia central en el despliegue de propuestas alternativas al manicomio, al identificarlas como una herramienta para la inclusión socio-económica de personas usuarias de servicios de salud mental y también de transformación social, en particular como un posible vehiculizador para la transformación de los imaginarios sociales de la locura y como medio en la construcción de estrategias de vida digna.

Actualmente en nuestro país hay algunos emprendimientos laborales de gestión colectiva integrados por personas usuarias de servicios de salud mental, cuatro tienen la figura jurídica de las cooperativas sociales y tres son emprendimientos colectivos sin forma jurídica, los cuales han sido impulsadas por centros de rehabilitación públicos y privados, grupo de familiares y la Universidad de la República (Assandri & Cardozo Carrero, 2022).

Los emprendimientos con los que se llevó adelante la investigación tienen la singularidad de ser impulsados y acompañados desde la Universidad de la República (UdelaR), a partir de proyectos de extensión. No obstante los resultados obtenidos nos aportan distintos elementos para reflexionar sobre el acompañamiento de este tipo de emprendimientos en general.

Sobre los colectivos y los equipos universitarios

Los colectivos con los que realizamos la investigación tienen como una de sus procedencias la extensión universitaria y es en ese encuentro que se desarrollan como emprendimientos, hablamos del Espacio Cultural Bibliobarrio y de la Cooperativa Social Riquísimo Artesanal. Desarrollaremos brevemente alguna de sus características.

El Espacio Cultural Bibliobarrio (BB) desde el 2010 abre tres veces por semana y lleva adelante: a) una biblioteca, con más de 6000 libros en distintas áreas. b) una editorial artesanal, donde se lleva adelante todo el proceso de forma artesanal: edición, impresión, compaginado, encuadernado y distribución. Actualmente tiene un catálogo de más de 20 libros del género literario. c). un espacio cultural, donde se han realizado más de 200 actividades de distinto tipo: cine-foros, peñas culturales, cafés literarios, presentación de libros, jornada de juegos, etc.

En noviembre de 2010 se comienza a brindar los servicios de Biblioteca y actividades culturales y en el 2012 inicia la producción de la editorial. Servicios y productos sin interrupción hasta la actualidad.

No tiene forma jurídica y ha estado integrado entre 5 y 10 personas, siendo entre 2 y 4 personas usuarias de servicios de salud mental. Para estas personas Bibliobarrio es el ingreso económico complementario más importante a la pensión por invalidez.

La viabilidad económica del emprendimiento se produce mediante la intersección de las tres áreas (socixs de la Biblioteca, edición de libros y actividades culturales a partir de la cantina solidaria) y por fondos públicos a partir de proyectos concursables (de programas del Estado, incluyendo la Universidad). Los proyectos o donaciones de particulares han permitido adquirir tanto los recursos materiales de tipo maquinaria y herramientas, los insumos necesarios para la editorial y mantenimiento, como también los libros de la biblioteca (estos últimos en un 80% han sido adquiridos mediante donaciones).

El colectivo se ha caracterizado por tener distintos espacios grupales para la toma de decisiones colectivas. Sus cometidos han ido cambiando en el devenir del proyecto y en algunos momentos han funcionado todos los espacios y en otros solo algunos. Los espacios son los siguientes: Asamblea, Espacio de gestión, Espacio de discusión de lxs trabajadorxs, Reunión de equipo universitario, Grupo terapéutico, Encuentros de cuidado de equipo.

El equipo universitario impulsa el inicio del emprendimiento en el año 2009 a partir de un proyecto de extensión estudiantil integrado por estudiantes de psicología y bibliotecología. Luego se va conformando como un equipo universitario interdisciplinario de estudiantes, egresadxs y docentes de psicología, bibliotecología y economía. A su vez se suman vecinas que conforman el equipo activamente.

Desde el año 2013 es un Espacio Cultural autónomo que se “desprende” del proyecto de extensión desarrollado hasta ese momento con la Universidad, aunque continúa su vinculación con esta institución mediante prácticas de estudiantes y otras instancias de articulación.

Por otra parte, la Cooperativa Social Riquísimo Artesanal (RA) es del rubro gastronómico, específicamente elaboran empanadas. Desde los inicios en el 2010 la producción se ha realizado en eventos puntuales o para una red pequeña de amigxs, ya que se prioriza trabajar en las formalidades necesarias para la creación de una cooperativa social, antes de tener una producción de forma más continuada. Se conforman como cooperativa social en el 2013, pero el resto de las autorizaciones se dan a partir del 2017, incluso cocinar en una cocina habilitada (que ha sido lo más difícil de concretar para el colectivo). A partir de esa fecha cocinan semanalmente y amplían la red de comercialización incluyendo las cantinas de la Facultad de Psicología y Ciencias sociales y consolidando una red más amplia de particulares.

La cooperativa ha tenido entre 5 y 7 integrantes, siendo entre 4 y 6 personas usuarias de los servicios de salud mental. Además, como dice el colectivo, tienen una amplia malla de apoyo de personas de la universidad, que constituye el grupo ampliado.

Existieron distintos espacios grupales durante estos años: reunión semanal de intercambio y toma de decisiones, espacios de coordinación con otras organizaciones, espacios de formación de lxs integrantes vinculado principalmente al cooperativismo y reunión del equipo de la universidad.

El equipo universitario que ha acompañado sistemáticamente el emprendimiento es de docentes, estudiantes y funcionarixs de la UdelaR, principalmente de psicología.

Como decíamos desde el 2013 se conforman como cooperativa social pero a partir del 2018-2019 es que comienzan a funcionar de forma más autónoma de la Universidad, aunque también siguen teniendo vínculo a partir de prácticas de estudiantes de distintas disciplinas.

Investigación encarnada

Se trató de una investigación cualitativa, situada y experiencial. Es una investigación encarnada en nuestras luchas sociales y en nuestra vida, la cual denominamos pasional y rebelde (Cardozo, 2018).

Optamos por un abordaje etnográfico, en su triple acepción: enfoque, método y texto (Guber, 2014) y como plantea Álvarez Pedrosian (2011) por la potencia para el despliegue de un trabajo científico, filosófico y artístico.

Esto nos posibilitó construir un abordaje integral, incorporando nuestras afectaciones, sentidos, memoria y un estar-ahí sensible junto con los colectivos, entramados con una problemática social actual en nuestro país.

Durante nuestra investigación utilizamos diferentes herramientas: a) observación-participante en RA durante cinco meses, participando de las distintas actividades del colectivo: reuniones, jornadas de cocinadas, eventos; b) revisión del material que disponían los colectivos hasta el momento que realizamos la investigación (en particular en BB incluyó un vasto material que el colectivo disponía de sus espacios de decisión, planificación, cuidado, artículos en revistas y congresos y cuadernos de notas personales desde el 2009 al 2016), c) entrevista grupal, una en cada colectivo (en el caso de BB con lxs psicólogxs que coordinaron el Grupo terapéutico y en el caso de RA con el equipo universitario); d) taller, uno con cada colectivo (en el caso de BB con todxs lxs integrantes para profundizar en relación a los espacios grupales, y los procesos de gestión colectiva en juego y en el caso de RA con todxs lxs integrantes para intercambiar algunos ejes del problema de investigación vinculados con la historia del colectivo); e) diario de campo, que fue una herramienta fundamental durante el despliegue del proceso.

También se realizaron entrevistas semi-dirigidas a informantes calificados vinculados a las cooperativas sociales: por un lado, a referentes técnicxs que impulsaron dos de las otras cooperativas sociales que integran personas usuarixs de los servicios de salud mental (una en funcionamiento y otra no) y por otro, a referentes técnicxs que dan seguimiento y asesoramiento en la conformación de las cooperativas sociales.

Para el trabajo de análisis diferenciamos dos momentos: a) análisis de la información producida en el trabajo de campo con cada colectivo; b) análisis transversal de todo el material. En el primer momento, se identificaron algunas escenas etnográficas, las que fueron orientadoras del proceso. Las escenas etnográficas son material en crudo, que narran una experiencia y nos indican puntos de insistencias de nuestras afectaciones a partir de la propia interconexión que íbamos realizando (Cardozo 2018). En los dos momentos, a partir del planteo de Álvarez Pedrosian (2011) transitamos por tres etapas: a) descubrimiento a partir de la lectura (una y otra vez) de todo el material; b) una primera codificación de datos para un afinamiento de la compresión; c) relativización de los descubrimientos.

La investigación se realizó con la autorización y consentimiento informado de las organizaciones. Para una fluida lectura, pero cuidado el anonimato, decidimos utilizar nombres ficticios, menos para lxs informantes calificadxs vinculados a las cooperativas sociales en los cuales usamos los nombres propios con su autorización.

Extensión universitaria e incubación de emprendimientos colectivos

En el período de 2006-2014, la UdelaR realizó una transformación institucional que se denominó como II Reforma Universitaria, donde la extensión ha tenido un papel protagónico. A su vez, ha sido referencia en universidades de la región en relación a la concepción de prácticas integrales (Tommasino, 2009), articulando funciones, disciplinas y saberes. Esta perspectiva de la extensión universitaria parte de un compromiso ético-político con las organizaciones sociales y las problemáticas que ellas expresan (Picos, 2014).

En este período se abrieron nuevas convocatorias de proyectos de extensión, en las cuales se enmarca los procesos que investigamos. Una de las líneas que fue una novedad es la de proyectos estudiantiles, la cual es una modalidad que permite que un grupo de estudiantes presente proyectos de extensión como práctica extracurricular (actualmente pueden acreditarse) a partir del interés de una temática, un problema social identificado, etc. El proyecto es acompañado por unx docente y apoyado con un fondo para gastos. En esta modalidad, en su primer llamado en el 2009, se presenta el equipo estudiantil que propone la creación del emprendimiento cultural Bibliobarrio, presentándose posteriormente en el siguiente llamado para dar continuidad al proceso iniciado. En relación al otro equipo se presentan a la convocatoria de Proyectos de Desarrollo Integral de la Extensión, que es para equipos integrados por docentes, pudiendo incluir estudiantes y egresadx, con trayectoria en determinado campo y un problema de intervención definido. En esta modalidad se financian sueldos, gastos e inversiones.

A pesar de las diferencias en las modalidades de los proyectos concursables y de las trayectorias y experiencias de los equipos, ambos se proponen llevar adelante proyectos de extensión desde una perspectiva integral (funciones, disciplinas y saberes), para aportar a la problemática social de la inclusión socio-económica de las personas usuarias de servicios de salud mental, por medio del trabajo. Parten de su antecedentes de prácticas universitarias y experiencias de otros países donde se identifica al trabajo cooperativo y asociativo como una potencia para la inclusión laboral y la construcción de nuevas relaciones sociales (Cardozo, 2021).

Los dos equipos se proponen el desarrollo de emprendimientos colectivos con personas usuarias de servicios de salud mental entre 2009 y 2011. Estos años se encuentran en el período de nuestro país denominado por Baroni (2019) como “el olvido del loco”, ubicado desde el 2005 al 2016, ya que a pesar de cambios importantes en la matriz de protección social, la salud mental es olvidada y no logra concretarse un cambio legislativo hasta el 2017. En ese sentido es que estas experiencias podemos considerarlas pioneras, teniendo como único antecedente la Cooperativa Social Sur Ya, creada en 2005. Es así que fueron un proceso de “experimentación” para los equipos universitarios, de constante ensayo y error, pero en una apuesta ético-política de que la idea de la cooperativa era posible.

Hemos identificado que estos dos proyectos de extensión universitaria se constituyeron en prácticas que podríamos denominar “incubación de emprendimientos” (Sarachu Trigo, 2009), en donde un equipo externo al (futuro) emprendimiento acompaña su proceso de construcción económica y de gestión colectiva.

Son ampliamente conocidos la incubación de emprendimientos desde las universidades en distintos países, existiendo una vasta experiencia desde las universidades de Brasil, conformando una Red Nacional de incubadoras (Cruz, Tillman, Della Vechia, & Nunes, 2011). En nuestro país se han desplegado a partir de prácticas integrales, enfocándose en lo que han denominado como construcción de viabilidades, “se asume una clara dimensión política que hace al proceso de hacer posible lo imposible, de asumir los desafíos de una construcción colectiva centrada en las potencialidades” (Sarachu Trigo, 2009, p.113).

En el siguiente aparado pasaremos a compartir algunas características de los proyectos de extensión, que se desprenden de los resultados de la investigación que realizamos, tomando como referencia las tres fases de los procesos de incubación: pre-incubación, incubación y des-incubación.

Pre-incubación. Construcción de la demanda a partir de una oferta

No conozco experiencias de salud mental, que surjan por organización propia de los trabajadores (…) En ese sentido la Universidad, dentro de las instituciones que uno puede identificar, es la que tiene ciertas condiciones de poder acompañar algunos procesos desde un lugar como menos implicado, o sea, no se da lo mismo desde el Ministerio de Salud Pública, donde ya está instalada esta línea más del eje de la salud atravesando la experiencia. Creo que la Universidad es desde las instituciones más transversalistas. Fernando Texeira (Comunicación personal, citado por Cardozo, 2018, p. 116)

Los equipos universitarios (se) proponen impulsar, promover y crear emprendimientos cooperativos para dar respuesta a la necesidad de inclusión laboral de personas usuarias de servicio de salud mental. Como se plantea en la frase del epígrafe, de una entrevista a un informante calificado, es muy difícil el inicio de experiencias de este tipo desde la auto-organización desde las personas usuarias de servicios de salud mental, a partir de los efectos/producción de la lógica manicomial (Cardozo, 2021).

En este sentido, ambos proyectos de extensión universitaria inician con una de las tres situaciones posibles planteadas por Rodríguez, Giménez, Netto, Bagnatto y Marotta (2001): la formulación de una oferta del equipo universitario a un grupo de personas usuarias de los servicios de salud mental. Esta “oferta” por parte del equipo universitario se enuncia como una propuesta de creación de una cooperativa de trabajo. El desarrollo de un proceso crítico de la extensión universitaria, plantea la necesaria problematización de este momento inicial, o sea problematizar la oferta, para desplegar lo que se denomina como construcción de la demanda. De esta forma, se realiza un primer diagnóstico y un ajuste a partir del encuentro entre las personas concretas, ya no un equipo universitario y un grupo de personas usuarias de servicio de salud mental, sino ese equipo y ese grupo.

Esta etapa generó distintos efectos en cada uno de los proyectos, pero en ambos casos se reafirma: a) la necesidad identificada de propuestas laborales; b) el objetivo de llegar a armar una cooperativa de trabajo.

En el caso de Bibliobarrio esta reformulación la podríamos puntualizar de la siguiente forma: a) la creación de la cooperativa pasó a ser un objetivo a mediano plazo e iniciar en el corto plazo las condiciones mínimas para desarrollarse como trabajo remunerado, ya que el grupo de personas usuarias de servicios de salud mental plantea la necesidad de la subsistencia económica en el aquí y ahora. Para ello el equipo universitario se responsabiliza de generar esas condiciones mínimas; b) pasar de un equipo disciplinar (psicología) a un equipo interdisciplinario (psicología, economía y bibliotecología) para abordar de forma integral la construcción de la viabilidad; c) conformar un grupo de personas usuarias de servicios de salud mental que no estuvieran en situaciones de vulnerabilidad “tan extremas” como lo era el primer grupo de personas, como por ejemplo: que se encuentren en situación de calle; d) mantener el rubro propuesto por el equipo universitario: crear un emprendimiento cultural, que pretendía que el trabajo no se limite a ser de limpieza y valorando que el desarrollo de una biblioteca popular aportarían en el proceso de transformación de los imaginarios sociales del locx como peligrosx/incapaz.

Esta reconfiguración provocó que la incubación esté caracterizada por un proceso de formación-producción en simultáneo, mientras se iba aprendiendo a gestionar un servicio de biblioteca, actividades culturales y un proyecto colectivo, se iba desplegando el servicio (se abre la biblioteca, se hacen actividades culturales, que permita una remuneración mínima pero “estable”). Por lo que se acompaña tanto la formación como la producción.

En el caso de Riquísimo Artesanal implicó: a) confirmar que el rubro del emprendimiento fuera gastronómico a partir de los antecedentes del grupo de personas usuarias de servicios de salud mental y consolidar esos aprendizajes de cocina en un saber-hacer; b) pasar de proponerse trabajar en la cocina del Hospital Vilardebó a la necesidad de trabajar fuera, a partir de distintas trabas institucionales y apostar a un fortalecimiento de redes externas al hospital, que significó como uno de los desafíos principales la búsqueda de una cocina habilitada por bromatología; c) iniciar el proceso de armado de la cooperativa social en el corto plazo.

En síntesis, en RA se define no empezar a producir/vender y por ende no generar un ingreso económico inmediatamente hasta que las “condiciones” estén dadas, como ser la conformación de la cooperativa, estar en una cocina habilitada y fortalecer el pasaje de aprender-hacer a saber-hacer tanto de la gestión colectiva como de los productos gastronómicos, partiendo de la formación e interés en el rubro que tiene el grupo de personas usuarias.

Este re-ajuste de las condiciones iniciales de cada proyecto, llevó varios meses de trabajo conjunto, dando paso al proceso de incubación propiamente dicha.

Incubación. Autogestión-solo-de-ellxs: emprendimiento cooperativo PARA personas usuarias de servicios de salud mental

El proceso de incubación conlleva crear y consolidar un emprendimiento cooperativo, siendo necesario generar todas las condiciones para que se desarrolle.

En este aparado queremos dar visibilidad a la práctica del equipo universitario para el desarrollo del proceso de incubación, que los equipos nombran en distintos momentos como acompañar, de alguna forma queriendo correrse de la referencia de “asesoría técnica”. Compartiremos algunas ideas de este proceso a partir de las preguntas: ¿para qué y por qué se acompaña? ¿qué es lo que se acompaña? Y ¿cómo se acompaña?.

A continuación lo presentamos sintéticamente en la siguiente tabla 1 y luego lo desarrollaremos.

Tabla 1: ¿Para qué, Por qué, Qué y Cómo se Acompaña? 

Nota: elaboración propia.

¿Para qué y por qué se acompaña?

Como veníamos diciendo la gestación de ambos proyectos colectivos inician “dentro” del proyecto universitario y el objetivo es ir produciendo un emprendimiento cooperativo por fuera del mismo.

De esta forma, en el proceso de incubación se disparan distintas acciones por parte de los equipos universitarios, ya que, como mencionamos, toman distintas decisiones en la etapa de pre-incubación, pero en ambos se proponen el acompañar la gestación y consolidación de un emprendimiento cooperativo PARA un grupo de personas usuarias de servicios de salud mental.

Con el “para” queremos subrayar la idea de que son emprendimientos solo de personas usuarias de los servicios de salud mental. O sea, la incubación se propone ir generando un proceso de fortalecimiento del emprendimiento hasta “necesitar cada vez menos acompañamiento”, en función del proceso de construcción de la viabilidad del mismo como cooperativa social, hacia la apuesta de una “autogestión solo de ellxs” (en palabras de los equipos universitarios).

Para el cumplimiento de este objetivo, en el proceso de incubación identificamos que es necesaria la producción de un pasaje, un cambio subjetivo (Guattari & Rolnik, 2005), que se relaciona con rupturas en dos sentidos: en relación a la lógica manicomial y la lógica salarial. Este doble pasaje es lo que lo diferencia de otro tipo de incubación de emprendimientos colectivos.

La doble ruptura necesaria se relaciona por un lado, a la perspectiva de trabajo protegido y su relación con los imaginarios sociales de la locura. Históricamente “lx locx” es ubicadx como alguien incapaz-improductivx-inferior-ignorante-irracional-peligrosx, construyéndose por un lado la identidad de “paciente psiquiátricx” y por otro la de técnicx psi como único que sabe, cura y cuida (Basaglia, 2008). Efectos y productos de lo que ya hemos mencionado como lógica manicomial. Es necesario por tanto producir otras formas de sentir/pensar/vivir la locura dislocada de su cristalización en la enfermedad, siendo necesario transformar las relaciones técnicx (psi.)-paciente (De Leonardis, O., Mauri, D. y Rotelli, F., 1995, Guattari & Rolnik, 2005) y crear nuevas relaciones sociales vinculadas a la locura-trabajo, para que lxs locxs puedan estar (subjetivamente) en condiciones de trabajar y de gobernar su vida.

Por otro lado, la ruptura con el trabajo dependiente producido por la cultura salarial (Castel, 1997) a partir del capitalismo, donde se iguala empleo a trabajo a partir de la relación patrxn-trabajadorx. El trabajo autogestionado implica una modificación en nuestra forma de trabajar (Sarachu Trigo, 2009), incorporando tareas intelectuales, espacio y tiempo para la toma de decisiones colectiva, proponer ideas, asumir riesgos, etc., que necesita de una disposición de cada quien para sostener dicha ruptura y una transformación en relación a la cultura del trabajo.

Por lo tanto, se acompaña estos procesos porque es necesario producir singular y colectivamente este doble pasaje para devenir locx-trabajadorx-cooperativista.

¿Qué es lo que se acompaña en estos procesos?

En un artículo anterior (Cardozo, 2021) planteamos que denominado a los emprendimientos de trabajo-acogida-vida, para dar visibilidad a las prácticas desplegadas e identificar que lo que se acompañan no es solo lo “productivo” y lo vinculado al emprendimiento estrictamente sino, estas otras dimensiones ligadas a situaciones singulares de lxs integrantes, pero que se tornan acciones imprescindibles para que el proceso “productivo” se desarrolle. En palabras de uno de los equipos universitarios: “lo que se está haciendo es construyendo, fortaleciendo y promoviendo las redes, que entra dentro del trabajo la producción de las empanadas, pero excede también” (Cardozo, 2018, p. 163). A su vez, decíamos que está transversalizado por la tensión entre asistencia y producción, donde muchas veces se reproducen las lógicas manicomiales y las lógicas salariales, deviniendo lxs técnicxs en patrones.

En los equipos universitarios que acompañan RA y BB se identifica la promoción otro trabajo (autogestionado), otra acogida (no normalizante), otra vida (vida digna de ser vivida), en el entendido que los proyectos de extensión se sustentan en proyectos ético-políticos de desmanicomialización y economía social y solidaria.

Cuando decimos otro trabajo, hacemos referencia a un trabajo digno (Fernández Álvarez, 2017): en relación a la remuneración, a las condiciones de trabajo, a las relaciones afectivas. Y un trabajo autogestionado (Sarachu Trigo, 2009): compartir trabajo, decisiones, información; medios de operación y resultados económicos. En otras palabras se acompaña: la construcción de la viabilidad económica del emprendimiento (incluyendo definiciones de productos/servicios, costos, vías de comercialización, local para la producción e infraestructura y materiales); las tareas administrativas-contables (tengamos presente que la memoria, la destreza del manejo del dinero, los conocimientos de computación, la escritura, la posibilidad de proyección a largo plazo, entre otras, están generalmente comprometidas); el pasaje del aprender-hacer al saber-hacer (rubro y gestión).

En relación a otra acogida, hablamos de tiempo, espacio y afecto que permita movimientos, animarse y arriesgarse (De Leonardis et al., 1995). Es acompañar el despliegue del entramado decir-decidir-cuidar, teniendo en cuenta que la palabra de los personas usuarias de servicios de salud mental ha estado históricamente silenciada, desvalorizada y muchas veces ridiculizada, por tanto se apuesta a construir un escenario colectivo para permitir transformar esos lugares sociales, y así poder-decir para poder-decidir colectivamente y construir una nueva narrativa, “somos cocinerxs, somos cooperativistas, somos trabajadorxs”, que se produce singular-colectivamente.

En estos procesos insiste la pregunta sobre qué hacer cuando el sufrimiento limita las condiciones concretas de la vida, porque como dice uno de los equipos universitarios: “llegan muchas veces muy mal, con medicación, con su cuerpo, con ese sufrimiento, con todo eso arriba” (Cardozo, 2018, p. 157). Vemos entonces, que se acompaña el sufrimiento, las historias de violencias y dependencias institucionales, podríamos decir que para estos equipos, acoger significa, acoger en su gesto, dolor, palabra, cuerpo, en su sufrimiento, en palabras de Grebert “permitir el despliegue de la/s locura/s, el delirio, los discursos y los distintos modos de existencia posible. Solo en ese despliegue, el proceso de re-singularización podrá realizarse” (2013, citada por Cardozo, 2018, p. 35).

Esto último también se relaciona con acompañar otra vida posible, en tanto una vida digna de ser vivida (Assandri & Cardozo Carrero, 2022), ampliando las redes para el sostenimiento de la vida, los encuentros y los tránsitos por la ciudad.

La calle, los refugios, los hogares y las pensiones son el circuito cuando se está condenado al ser loco y pobre (Basaglia, 2008). Estas situaciones significan muchas veces vivir en condiciones muy precarias, cuartos muy pequeños (o solo espacios para dormir en caso de los refugios), horarios pautados (llegada, cocina, invitados), pocos o nulos espacios para la vida privada (vida sexual, soledad, amistades) y limitaciones en actividades vinculadas a la gestión de la vida cotidiana, y en el peor de los casos estar a la intemperie (Cardozo, 2018, p. 159).

Todas estas situaciones se hacen texto cotidiano de los emprendimientos, por el simple hecho que la propia lucha por la supervivencia muchas veces significa no estar disponible para planificar, imaginar y decidir sobre el futuro y presente del emprendimiento. Por tanto, la articulación institucional y con distintas organizaciones sociales para vislumbrar nuevas estrategias de vivienda, para afrontar situaciones familiares, para negociar bajar la medicación o manejar de otra forma el tratamiento ante situaciones de emergencia o crisis, son muy importantes para el sostener del trabajo y una vida otra. También fortalecer las tramas comunitarias, a partir de nuevos circuitos por la ciudad (a partir de las tareas de compras de insumos, comercialización, etc), trazar otros lazos sociales (ferias, espacios de comercialización, encuentros cotidianos en la producción, etc), o incluso la presentación de la experiencias en eventos y congresos que permite, entre otras cosas, habitar las instituciones académicas desde otro lugar.

La triada trabajo-acogida-vida son parte de la estrategia integral del Proyecto de Extensión Universitaria, que se despliega entre contradicciones, fortalezas, frustraciones e incertidumbres.

¿Cómo se acompaña en estas experiencias?

Entonces ¿cómo se acompaña la producción colectiva de otro trabajo, otra acogida y otra vida, para la autogestión-solo-de-ellxs? Lo que nos interesa resaltar son los modos que transversalizan las estrategias desplegadas que entrecruzan trabajo-acogida-vida, como se puede ver en la tabla al inicio del apartado: a) no sustituir, b) sostener otra temporalidad, c) abordaje interdisciplinario y trabajo en red.

Identificamos que los acompañamientos se despliegan desde el estar compartiendo mucho tiempo-espacios juntxs y se hace desde una perspectiva de no sustituir sino apoyar, o sea, no hacer-por sino hacer-con, a partir de “un estar cotidiano, sensible y atento, en dispositivos muy a terreno” (Cardozo, 2018, p. 130). Apoyar desde esta perspectiva es hacer juntxs. Cuando se hacen libros o empanadas, se comparte el trabajo, no se dirige, pero sí se aporta en cómo mejorar tiempos, organizar espacios y procedimientos. Aunque en las tareas administrativas-contables ha sido necesario “amortiguar” un poco, realizando algunas tareas, lo que permitió generar ciertos aprendizajes en distintos planos durante el proceso e ir definiendo diferentes sistemas de apoyos (informes, planillas de registro, procedimientos de armado de libros/empanadas, guías de trabajo, carteleras, etc.), algunos desplegados desde prácticas estudiantiles de enseñanza de grado de la UdelaR.

Por ejemplo, uno de los equipos menciona el proceso de aprendizaje en relación a las compras, cuánto se compra, qué se compra y para qué, cuánto salió y el manejo del dinero, lo que plantean como la destreza en relación a la vida cotidiana, que es una de las cosas que han trabajado durante bastante tiempo y que al principio incluía ir con ellos, pero que ahora ya no y se ha incorporado al proceso de trabajo.

También identificamos que una de las preguntas que atraviesan los procesos de incubación de los emprendimientos fue “¿Cómo acompañar sin ordenar en tiempos y espacios hegemónicos? ¿Cómo oponerse a los modos dominantes de la temporización? (Guattari & Rolnik, 2005), que son lineales, del orden de lo uno, del orden capitalístico y por tanto manicomial” (Cardozo, 2018, p.127). En este sentido, los equipos plantean que los procesos se dan en otros tiempos pero también hay un equipo universitario que se dispone a dedicar tiempo para sostener estos procesos con otras temporalidades (Oury, 1998; Baschet, 2014).

A modo de ejemplo: RA es una cooperativa gastronómica, ponerse delantal y gorro blanco es normativa de bromatología, pero qué pasa cuando para alguien les es imposible cumplir ese acuerdo. El día que llegan los delantales y gorros, alguien dice: “blanco no me pongo nada”. Unos días después había cocinada (día que cocinan empanadas) y sin el delantal no se podía estar en la cocina, pero sí en el salón que antecede la cocina, la persona que días antes dijo que no se pondría el delantal y gorro estuvo ahí por un buen rato, junto con las otras personas que tampoco tienen delantal, yo soy una de ellas, un integrante del equipo universitario es otro. En un momento se pone el gorro y el delantal y entra a la cocina. “Franco sabe que es una normativa, no es cuestión de entender eso. No es una cuestión de comprensión (cognitiva), es una cuestión de sentido. Es cuestión de que le haga sentido, otro sentido más allá de la norma” (Cardozo, 2018, p.126).

El salón fue por ese tiempo un espacio de acogida, espacio de refugio, como también el gesto del equipo universitario de acompañar esa decisión, no solo no imponiendo la norma sino acompañando cuerpo a cuerpo ese momento, como posibilitador de construcción de confianza, ya que si se necesita, puede volver al salón.. Algo que entendemos permitió,

decidir arriesgarse a ponerse el delantal, más allá de lo que pueda implicar para Franco ponerse algo blanco (…) Los mecanismos de autorregulación grupal, en este caso, no fueron dos: con delantal - sin delantal, sino que hay -al menos- una tercera opción: un tiempo de espera, de descanso (Percia, 2013), un tiempo otro (Cardozo, 2018, pp. 129-130).

Otro ejemplo de esa otra temporalidad, es el acompañar el proceso de poder-decir al poder-decidir colectivamente. En este sentido, BB se despliegan múltiples espacios grupales, entendiendo que es necesaria lo que planteamos como la experimentación del decir (argumento-entendimiento-pensamiento-afectación) (Cardozo, 2018). Durante el acompañamiento uno de los objetivos era ir descentrando las decisiones del Equipo Universitario, para que de apoco el grupo de personas usuarias de salud mental fuera asumiendo nuevas decisiones. El entramado de espacios grupales, se crea entendiendo que con solo el espacio de las asambleas no es posible tomar decisiones colectivas, siendo necesaria la circulación de las ideas, las palabras, las dudas, transformándose en un proceso de toma de decisiones, donde en la asamblea se resuelve algo que fue pasando en otros espacios y tiempos individuales y colectivos, donde de forma simultánea se posibilita la gestión colectiva del emprendimiento y el devenir de trabajadorx-cooperativista.

Por último queremos destacar el abordaje interdisciplinario y el trabajo en red que ambos equipos despliegan. Por un lado, ya sea conformando un equipo interdisciplinario como articulando con otrxs. Este abordaje es tanto para la construcción de la viabilidad de los emprendimientos, que ha implicado por ejemplo desplegar la potencia de recursos, formación y vínculos que el equipo universitario dispone. También en relación a las situaciones de padecimiento, el efecto de la institución psiquiátrica y el circuito de la pobreza, que como dice uno de los equipos se genera a partir del vínculo de confianza, implica desde: llamar al médicx para pedir bajar la medicación, conversaciones cotidianas, o por ejemplo, en personas en situación de calle visitarla todos los días donde está para ayudarlx en la búsqueda de vivienda, para conversar con algo caliente. Estas intervenciones pasan a ser un nudo de trabajo en los equipos, ya que estás situaciones (la trama manicomial o los circuitos de la pobreza) insisten con ser figura en los procesos.

¿Desincubación? Disputar la (im)productividad: emprendimiento de trabajo-acogida-vida CON personas usuarias de servicios de salud mental

Ambos equipos universitarios en determinado momento, de cada proceso, empiezan a preguntarse: si será posible la autogestión-solo-de-ellxs. Porque en el proceso de: no sustituir sino apoyar, a sostener otra temporalidad y al intervenir interdisciplinariamente, los equipos discuten constantemente sobre cómo disputar la productividad, o sea, como efectivamente conformarse en un emprendimiento económico que permita generar recursos para complementar otros ingresos posibles (pensiones por ejemplo) y sostener las necesidades básicas de una vida digna, como también que suceda el pasaje para la consolidación del emprendimiento cooperativo y por ende una “des-incubación”.

A su vez, esta pregunta moviliza el deseo y la posibilidad de egresadxs de los equipos proponer incorporarse como integrante de los emprendimientos y así “disputar la (im)productividad”. De esta forma se produce una metamorfosis en el proceso de incubación. De consolidar el emprendimiento PARA personas usuarias de los servicios de salud mental, a desarrollar un emprendimiento CON personas usuarias de los servicios de salud mental. Y la pregunta pasa a ser ¿por qué no la autogestión-juntxs?

Este devenir en un emprendimiento mixto (como se le dicen en otras partes del mundo) es para algunxs imprescindible y quizá un movimiento necesario para el proceso de transformación de la sociedad.

Foucault (2012) plantea que el poder disciplinario crea “nuevos sistemas de recuperación, (para) restablecer siempre la regla” (p. 76) y los denomina sistemas disciplinarios complementarios, e indica que por ejemplo las escuelas especiales se ubican ahí. La creación de escuelas especiales son una política de inclusión social de acceso a la educación para aquellos considerados los “residuos” del dispositivo disciplinario de la escuela (Cardozo, 2018, p. 169).

Siguiendo estos planteos podríamos decir que los emprendimientos solo de personas usuarias de los servicios de salud mental, son dispositivos disciplinarios para los “residuos” del trabajo capitalista. Entonces, podríamos plantear que estos movimientos se ubican en una apuesta a “cerrar” los emprendimientos productivos integrados solo por personas usuarias de los servicios de salud mental, en tanto reproducen la lógica de las escuelas especiales. Y crear emprendimientos “mixtos” supone nuevos desafíos.

¿Autogestión-de-un-nosotrxs? La construcción de unx profesional otrx

En el transcurso del artículo fuimos recorriendo las perspectivas ético-políticas y metodológicas de los equipos universitarios, en el acompañar la creación y consolidación de un emprendimiento laboral cooperativo para personas usuarias de servicios de salud mental, partiendo de identificar que es necesario que se produzca un pasaje a partir de una doble ruptura: la lógica manicomial y la lógica salarial para el devenir paciente-trabajadxr-cooperativista. A su vez, planteamos que se acompaña no solo un emprendimiento laboral cooperativo sino otro trabajo, otra acogida y otra vida, a partir de tres modos de acompañar: a) no sustituir, b) otra temporalidad, c) abordaje interdisciplinario y trabajo en red.

En el proceso de incubación, los equipos fueron creando y apostando la construcción de un nosotrxs a partir del encuentro, desde la convivencia entre todxs, integrar-nos desde otros lugares, tanto las personas usuarias de los servicios de salud mental como lxs “universitarixs” y desplegar nuevas formas en la relación trabajo-acogida-vida. Lo cual produce la construcción de emprendimientos con y ya no para. Podríamos decir que estas transformaciones “se relacionan directamente con la construcción de un “tipo” de universitarix/intelectual, que intenta construir su vida en relación a prácticas prefigurativas de ese mundo deseado, soñado e imaginado” (Cardozo, 2018, p.196).

Ahora bien, estas experiencias (RA y BB) que parten de propuestas de formación de profesionales, a partir de proyectos de extensión universitaria, interrogan el lugar de futurxs técnicxs. ¿Cómo producimos propuestas de inclusión socio-económica a través del trabajo, si no cambiamos nuestras forma de relación como profesional? ¿Cómo formamos profesionales para que sean cooperativistas, de éstas cooperativas? Sin duda, nuestra investigación nos permitió identificar que la extensión universitaria tiene un lugar significativo para vehiculizar prácticas sensibles y potentes, posicionándose desde una política afectiva, el fortalecimiento de las tramas comunitarias y partiendo de las luchas sociales. Nos queda abierta la pregunta sobre los desafíos de la gestión colectiva de emprendimientos con estas integraciones, si efectivamente potencia las viabilidades y cuál sería el papel de la universidad en estos procesos.

En los antecedentes referentes a la temática (Andrade, 2013; Campos y Reis, 2020, Freytes, et al, 2018) se destaca la gestión colectiva y la viabilidad como uno de los problemas centrales identificados, vinculado mayormente a: la dependencia del sistema sanitario de los emprendimientos, las cooperativas/emprendimientos mayoritariamente son integradas solo de personas usuarias de servicios de salud mental y el equipo de salud es externo a la cooperativa/emprendimiento y son quienes gestionan la experiencia. Teniendo presente esto y que aún nos enfrentamos a grandes desafíos en los procesos de reformas psiquiátricas en los países de la región y sigue siendo fundamental la pregunta enunciada por los movimientos sociales: ¿qué abrir para cerrar los manicomios?, esta investigación representa un aporte en este sentido a partir del quehacer de estos colectivos y las formas que se han creado y recreado para producir, disputar y sostener las condiciones para que sus integrantes puedan sostener el trabajo y la gestión colectiva de los mismos.

Referencias

Álvarez Pedrosian, E. (2011). Etnografías de la subjetividad. Herramientas para la investigación. Montevideo: LICCOM-UdelaR. [ Links ]

Andrade, M. (2013). O encontro da loucura com o trabalho na economia solidária: a produção de práxis de pré-incubagem através do dispositivo intercessor na saúde mental. (Tese doutorado). Recuperado de http://hdl.handle.net/11449/105590Links ]

Assandri, C., & Cardozo Carrero, D. (2022). Gestión colectiva para la sostenibilidad de la vida en el marco de los procesos de reforma psiquiátrica en la región. ORG & DEMO, 23(1), 99-116. [ Links ]

Baroni, C. (2019) Una historia de locos Aportes de Radio Vilardevoz al proceso de desmanicomialización en Uruguay (1997-2017). (Tesis de doctorado). Recuperado de https://www.colibri.UdelaR.edu.uy/jspui/bitstream/20.500.12008/27198/1/tesis%20final%20doctorado%20baroni.pdfLinks ]

Basaglia, F. (2008). La condena de ser loco y pobre. Buenos Aires: Topia. [ Links ]

Baschet, J. (2014). Adiós al capitalismo. Autonomía, sociedad del buen vivir y multiplicidad de mundos. Buenos Aires: Futuro Anterior. [ Links ]

Campos, I. O., & Reis, M. R. (2020). Economia solidária, saúde mental e inclusão: uma revisão da literatura. Rev. Interinst. Bras. Ter. Ocup, 4(4), 674-687. [ Links ]

Cardozo, D. (2018). Desmanicomialización en el Uruguay: experiencias de gestión colectiva en dos emprendimientos de trabajo-acogida-vida (Tesis de maestría). Recuperado de https://www.colibri.UdelaR.edu.uy/jspui/bitstream/20.500.12008/28492/1/Tesis%20Dulcinea%20Cardozo%20%28para%20difundir%29.pdfLinks ]

Cardozo, D. (2021). La economía social y solidaria en los procesos de desmanicomialización: emprendimientos de trabajo-acogida-vida. Pampa. Revista Interuniversitaria de Estudios Territoriales, (23), 100-120. 10.14409/pampa.2021.23.e0035 [ Links ]

Castel, R. (1997). La metamorfosis de la cuestión social. Una crónica del salariado. Buenos Aires: Paidos. [ Links ]

Cruz, A., Tillman, R., Della Vechia, R., & Nunes, T. (2011). La Red de Incubadoras Tecnológicas de Cooperativas Populares en Brasil: pasado, presente y desafíos para el futuro. Revista del Centro de Estudios de Sociología del Trabajo, (3), 3-30. Recuperado de https://ojs.econ.uba.ar/index.php/CESOT/article/view/512Links ]

De Leonardis, O., Mauri, D., & Rotelli, F. (1995). La empresa social. Buenos Aires: Nueva visión. [ Links ]

Fernández Álvarez, M. I. (2017). La política afectada: experiencia, trabajo y vida cotidiana en Brukman recuperada. Rosario: Prehistoria ediciones. [ Links ]

Freytes, M., Selva, S., Copella, M., Nabergol, M., Vila, V., Russo, C., Garzón, A. C., … Araujo, M. V. (2018). Diagnóstico sobre empresas sociales en salud mental en Argentina : Proyecto de investigación aplicada en las cooperativas que presentan servicios de cuidados y a las empresas sociales de salud mental: hacia el fortalecimiento de un actor social en crecimiento. (s.l.) : UNTREF, UNQ, UdelC, UNla. Recuperado de https://drive.google.com/file/d/17UAQbWfD2yLJ7V-T46b2xCaEKdRuxkgj/viewLinks ]

Guattari, F., & Rolnik, S. (2005). Micropolítica: cartografías del deseo. Buenos Aires: Tinta limón, Traficantes de sueños. [ Links ]

Guber, R. (2014). La etnografía: Método, campo y reflexividad. Buenos Aires: Siglo Veintiuno. [ Links ]

Oury, J. (1998). Libertad de circulación y espacio del decir. Recuperado de https://www.topia.com.ar/articulos/libertad-de-circulaci%C3%B3n-y-espacio-del-decirLinks ]

Picos, G. (2014). Extensión rural: genealogía y construcción de referencia filosóficas hacía nuevas prácticas en el Uruguay. Montevideo: Extensión libros. [ Links ]

Rodríguez, A., Giménez, L., Netto, C., Bagnatto, M. J., & Marotta, C. (2001). De ofertas y demandas: una propuesta de intervención en psicología comunitaria. Revista de Psicología de la Universidad de Chile, 10(2), 101-109. [ Links ]

Sarachu Trigo, G. (2009). Prácticas integrales hacia la construcción colectiva de viabilidades: un análisis de las relaciones y desafíos de la Incubadora de Emprendimientos Económicos Asociativos Populares (INCOOP/UEC). Revista Estudios Cooperativos, 14(1), 106-117. [ Links ]

Tommasino, H. (2009). Generalización de las prácticas integrales. Los aportes de la extensión para su Implementación. En III Congreso Nacional de Extensión Universitaria. Ponencia presentada en Congreso, Universidad Nacional del Litoral, Santa Fé, Argentina. [ Links ]

Uruguay. (2017). Ley Nº 19.529: Ley de Salud Mental. Uruguay. Recuperado de: https://www.impo.com.uy/bases/leyes/19529-2017Links ]

Declaración de contribución de los/las autores/as DCC es responsable de la totalidad del artículo.

Editor/a de sección Las editoras de sección de este artículo fueron Isabela de Oliveira Lussi y Selva Sena. ORCID ID: 0000-0003-3632-5539 ORCID ID: 0000-0002-6418-8562

Recibido: 21 de Enero de 2023; Aprobado: 23 de Octubre de 2023

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons