EDITORIAL

Este es el primer número de la Revista del año 2014.

No hemos alcanzado aún la tan deseada puntualidad en su periodicidad, pero si logramos en pocos meses publicar el segundo número de 2014, estaremos cerca de la meta.

Ello no es un capricho, sino una exigencia para permanecer en las redes virtuales, lo que nos asegura visibilidad.

El ejercicio de la especialidad sigue sufriendo modificaciones en diversos sentidos, pero es fundamental que nosotros seamos los protagonistas del cambio y evitar así que éste venga impuesto desde afuera, respondiendo a quién sabe qué intereses.

Sigue imperando en anestesia, como en el resto de la medicina, el multiempleoo, mejor dicho, el multisubempleo , con todo lo que implica en cuanto a pérdida de la calidad de nuestro trabajo. Es muy probable que el régimen laboral, colabore en buena medida en los altos índices de insatisfacción que se detectan en la especialidad. Es llamativa la alta incidencia de burn out, especialmente entre los colegas más jóvenes (residentes de los primeros años). Quizá  ha llegado el momento de reflexionar acerca del tema y abordarlo en forma integral a fin de lograr trabajo de calidad, tanto para el usuario como para el trabajador. Esta labor debe ser llevada a cabo en forma conjunta, por los colegas que se inician en la práctica anestesiológica y aquéllos que desempeñan cargos de responsabilidad institucional.

En enero de este año falleció Ana María Montaldo. Fue una brillante anestesióloga poseedora de una sólida formación, adquirida durante su actuación como Asistente y Profesora Adjunta de la Cátedra de Anestesiología. A esa solidez académica, unió principios éticos muy sólidos de los que nunca se apeó. En otra página de este número Estela Fossemale, quien fuera su amiga y compañera durante muchos años, se refiere a su personalidad.

También falleció Carlos Torres (Perico para quienes lo conocimos). Retirado de la práctica clínica hace ya algunos años, se caracterizó por ser un excelente anestesiólogo. Fue un promotor incansable de las técnicas regionales, cuando éstas eran poco frecuentes en nuestro medio. Enviamos nuestra solidaridad a su esposa y colega Graciela Rioseco. El Dr. Wilson Vezoli se refiere a él en este número.

Dr. Jorge Katzenstein

Director

Consejo Editorial