Con este editorial cerramos un nuevo período de dos años de nuestra querida Sociedad Uruguaya de Pediatría (SUP) y de la Comisión Directiva que tuve el honor de presidir.

Las personas pasan, las instituciones permanecen y crecen con el esfuerzo de todos aquellos, que desde los diferentes lugares que ocupan, trabajan en pos del cuidado de niños, niñas y adolescentes, así como también de los pediatras que somos quienes tenemos la enorme responsabilidad y la noble tarea de su cuidado.

Hemos sido testigos del esfuerzo que desde el Estado se ha realizado en políticas de salud y sociales; sin embargo, la desigualdad y la inequidad se mantienen y los derechos de este grupo etario continúan siendo vulnerados. Mucho se ha hecho, mucho falta por hacer y desde nuestra Sociedad, desde cada una de sus secretarías y comités, hemos trabajado en los temas que nos preocupan como pediatras y como ciudadanos.

En este contexto, desarrollamos nuestra gestión en el período que finaliza. “El niño padre del hombre”, lema que elegimos para el Congreso 2019, traduce justamente nuestra preocupación por el hoy de niños, niñas y adolescentes.

Reactivamos el Comité de Pediatría Social por la importancia que tiene el análisis de todos los aspectos que vulneran a esta población y que repercuten en su desarrollo.

Las desigualdades sociales y las agresiones medioambientales, además de conspirar con el buen crecimiento y la salud de la población más vulnerable, hipotecan el futuro del país. Niños, niñas y adolescentes víctimas de violencia familiar, con falta de contención afectiva y emocional, con problemas de alcohol, drogas, privados de libertad, o porque sus madres lo están, recién nacidos abandonados e institucionalizados, desarrollándose en un ambiente que no les es propicio, con falta de contención y contaminación ambiental, que repercuten en el desarrollo y comprometen su futuro.

El Comité de Salud Ambiental no continuó en sus funciones, como lo hubiésemos deseado, si bien en forma individual distinguidos pediatras nos hicieron llegar problemáticas que hicimos nuestras, como la contaminación de los alimentos por las fumigaciones no controladas y los transgénicos, pero poco más podemos hacer si estos problemas no se abordan estableciéndose claras políticas de Estado.

Integramos el FOSPECS (Foro de Sociedades Pediátricas del Cono Sur), reuniones a las que llevamos las diferentes propuestas y posiciones que la SUP adoptó en temas como la ley de protección a las personas trans, migración, adopción, conflicto de intereses, consumo problemático de sustancias, cannabis medicinal, inequidad en las AYEX, inmunizaciones, reemergencia de enfermedades infectocontagiosas, sobrepeso y obesidad, entre otros. Los diferentes informes que surgieron de esas reuniones y desde la SUP, así como campañas de prevención, publicados en nuestra página web, nos han permitido posicionarnos frente a la población. El trabajo con la empresa SIGNO, en el manejo de la comunicación y medios, ha sido de gran utilidad y con muy buenos resultados por el efecto multiplicador que tienen los temas que tanto nos preocupan.

Tenemos pendiente un informe conjunto del Comité de Lactancia y el Comité de Estudio y Prevención de la Muerte Súbita e Inesperada del Lactante por el tema del colecho y la lactancia, sobre lo que necesitamos tener una posición unánime que no amerite discusión.

Iniciamos en forma conjunta con la Secretaría de Educación Médica Continua el camino para contar con una plataforma que nos permita realizar nuestros propios cursos a distancia, lo que será beneficioso para todos los pediatras que por razones de tiempo o vivir en el interior no pueden participar en cursos presenciales.

Desde la Secretaría de Asuntos Laborales nos preocupamos por el ejercicio profesional, la calidad de trabajo de los pediatras en los diferentes niveles de atención, participamos en las instancias de mesas de trabajo con el Sindicato Médico del Uruguay y la Administración de los Servicios Sociales del Estado, con logros favorables en muchos casos y con temas pendientes para los próximos años. Realizamos una encuesta que fue publicada en nuestro Boletín sobre la calidad del trabajo de los pediatras, comparándola con una anterior de 2011, que invitamos a leer si aún no lo hicieron.

La modernización de la Biblioteca ha sido uno de los cambios más importantes en lo que a recursos disponibles para nuestros socios refiere, con un nuevo sistema informático que esperamos, cuando esta revista llegue a sus manos, ya esté disponible para todos ustedes.

Creemos fundamental convocar a profesionales jóvenes, que son los potenciales generadores de cambio para que se integren a la Comisión Directiva, las secretarías y los comités, como una necesidad impostergable para el futuro de la SUP.

Para finalizar este breve recorrido, en el que mucho ha faltado, quiero darles las gracias a todos quienes colaboraron en estos dos años de mi presidencia. A los compañeros de la Comisión Directiva, por su esfuerzo, dedicación y paciencia para conmigo. A los integrantes de las diferentes secretarías y comités por el trabajo realizado, por los informes que siempre nos llegaron cuando fueron solicitados, por el magnífico congreso que gracias a todos ustedes y a los prestigiosos invitados que trajeron fue posible. Al personal de Secretaría y Biblioteca, que son nuestra mano derecha e izquierda, que con dedicación y esmero logran mantener la casa en orden.

A todos ustedes, gracias por acompañarnos. El mejor deseo de éxito en la gestión para la próxima Comisión Directiva y siempre recordemos que “todo lo que concierne al niño sano o enfermo no nos debe ser indiferente”.