Nilda

LA COMISIÓN DIRECTIVA de la Sociedad Uruguaya de Pediatría desea expresar su profundo dolor y consternación ante el fallecimiento de la Dra. Nilda Crovetto.

El mutilado comienzo del Cantar del Mio Cid: "...de los sus ojos tan fuertemente llorando..." no lo pudimos manifestar en tiempo y forma, ni individual ni colectivamente, ante los familiares de Nilda y ante la comunidad pediátrica toda, por factores que mucho tienen que ver con esta mentada globalización, que cada vez nos aísla más y más solos nos va dejando.

Recordar a Nilda significa "volver a pasar por el corazón" y queda allí, firme y optimista, siempre con su amplia sonrisa, que asociaba felicidad con sabiduría y también en los labios tarareando una canción.

Como pediatra unió a su sólida formación e instinto clínico y a su espíritu razonador una condición humana excepcional, abierta al sufrimiento y a la naturaleza integral del niño, al que supo tratar no sólo con medicamentos, sino también con su enorme simpatía personal, con su extraordinario caudal de empatía.

El don de gente que Nilda poseía hablando, explicando y transmitiendo optimismo era absolutamente invariable en la más remota Sala del Hospital Pedro Visca o en el encumbrado Servicio de Pediatría de Casa de Galicia o en cargos de Dirección en el MSP. Era igual de amable, fraternal, comprensiva y compasiva estuviera donde estuviera y mucho aprendimos de esta actitud suya.

Con Martí afirmamos: "cuando se hace el bien, la muerte no es verdad".

Dr. Edmundo Batthyany